La Ciudad se empieza a vaciar, mientras los diarios muestran fotos de las rutas cargadas de autos camino a la playa. El noticiero nos previene acerca del uso de la pirotecnia. Todos empiezan a hacer sus balances de fin de año. Maru Botana nos da recetas para el 31, mientras el Dr. Cormillot nos da consejos para no excedernos de kilos. Horangel y Ludovica Squirru dan sus predicciones para el año entrante, nos enteramos de los famosos que se están yendo a pasar sus vacaciones a Punta del Este, mientras que por todos lados se emiten ediciones especiales sobre los hechos más destacados del año.
En ese clima findeañero, es difícil no contagiarse y hacer un propio balance del año, e incluso animarse a desear algunas cosas para el año que viene. ¡Qué calor me da pedir más, cuando ya se me dio tanto, tanto, tanto!
Es mañana de viernes, hoy no me toca trabajar, así que tomo el desayuno en pijama y pongo por tercera vez el CD de Tefi (del que ya les conté el otro día), que por fin tengo conmigo y es un placer absoluto.
Anoche hablaba con ella de los cambios que estoy queriendo para mi vida, y que en parte son los que motivaron la creación de este blog. Debo estar especialmente receptiva para esos temas, porque por todos lados escucho de otras personas que están pasando por inquietudes parecidas: por ejemplo, la noticia que nos contaba el otro día Sole de "Espacio entre letras", o el post de esta mañana de Vix y sus ganas de dibujar. Todo me está diciendo "animate", todo me está llamando, interpelando.
Más arriba cuando mencioné a Ludovica Squirru lo hice en chiste... soy lo menos "horoscópica" que hay... Pero cuando leí lo que estaba diciendo, otra vez era un mensaje para mí (Dale, ¡me están cargando!):
"El año del dragón es para reinventarse. Aquel que no se había animado tiene que buscar un nuevo camino. La imaginación tiene que volver a ganar terreno".
Así que Sole, Vix, y todos los que estén buscando reinventarse, les dejo ese mensaje, y esta propuesta: empecemos juntas. Si ustedes se animan, quizás yo también.
Cierro el último post del año con esto, que es lo que pido para el nuevo año (es la oración de alcohólicos anónimos, pero siempre me encantó):
Dios, dame la serenidad de aceptar las cosas que no puedo cambiar;
valor para cambiar las cosas que puedo;
y sabiduría para reconocer la diferencia.
Yo no sabía pero la oración sigue:
Viviendo un día a la vez;
Disfrutando un momento a la vez....
Eso sería todo.