jueves, 27 de noviembre de 2014

Suspiro Limeño

En Chile es muy común la comida peruana, y es casi un deber gastronómico probarla. El Ingeniero tuvo un par de buenas experiencias en sus primeros días acá, y tomó el firme propósito de incursionar en la cocina peruana.
 

Sus dos primeros experimentos fueron con postres: Leche Volteada (o crema volteada)  y Suspiro Limeño. Espero impaciente el momento que se anime con un ceviche, pero estos platos dulces resultaron un espectáculo.
 
Hoy les cuento cómo hacer el Suspiro Limeño, proceso en el cual participé como ayudante de cocina y fotógrafa. Por supuesto que la idea de sacar fotos se me ocurrió tarde y estuve molestando al cocinero para que repita esto, haga aquello más lento, etc. Lo mejor fue cuando revolví el tacho de basura en busca de las cáscaras y latas usadas... porque la dignidad la perdimos el día que nos abrimos un blog.

Suspiro Limeño  |   Ingredientes:

Para la crema:
- 3 yemas
- esencia de vainilla, "un chorrito"
- canela, una cucharadita
- 1 lata de leche condensada
- 1 lata de leche evaporada (ya se, me van a odiar porque en Argentina no se consigue. Parece que hay en el Barrio Chino de Belgrano, y sino vayan al final del post que les cuento cómo hacerla casera).
Info reciente: La consiguen en Tina&Co, en el barrio chino, Mendoza entre Arribeños y Montañeses, gracias @lasrtacora!. O a veces en Jumbo, gracias Vero Palazzo!

Para el merengue:
- 3 claras (por cuestión de principios rechazo toda receta que use distinta cantidad de yemas que de claras)
- oporto 50ml
- azúcar 180gr

Equipamiento: necesitás batidora!

Idea extra: creo que podría funcionar muy bien combinado con frutillas o arándanos, especialmente arándanos porque le darían un toque amargo a tanto dulzor.


Procedimiento:

En una cacerolita poner a calentar la leche evaporada, la leche condensada, las yemas y la esencia de vainilla, a fuego medio tirando a bajo. Batir la mezcla con batidora mientras está en el fuego, hasta que quede espumosa.

Agregar un poco de canela. Sin retirar del fuego, seguir calentando y revolviendo cada tanto con cuchara, hasta que se ponga espesa. Son aproximadamente unos 20 minutos al fuego. Apagar y dejar enfriar.

Ahora el merengue. Se puede hacer un rato más tarde, total hay que dejar enfriar lo anterior. Preparar un almíbar con azúcar y oporto, es decir, reemplazando con oporto lo que normalmente sería agua (si en lugar de oporto usan un syrah tardío dulce como hicimos nosotros, les queda un hermoso merengue celeste). Batir las claras a nieve y agregar de a poco el almíbar sin dejar de batir, hasta que llegan a la consistencia durita del merengue italiano.


Finalmente se preparan postrecitos individuales, con la crema abajo y el merengue arriba, en los vasos o bowls que más les gusten. Sugiero que sean vasos chiquitos porque es una bomba. Encima del merengue pueden espolvorear canela, cosa que me olvidé.  Se dejan por lo menos una hora en heladera, si puede ser más mejor, y después se cucharean con gula. Fin!
 
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Sobre la leche evaporada:
 
Es, simplemente, una leche concentrada, ya que tiene menor contenido de agua. Se logra evaporando el 60% del agua que contiene, con lo cual de 1 litro de leche entera se obtienen 400ml de leche evaporada.
Para hacerla en casa, hay que reducir la leche a la mitad (tendría que ser un 40%, pero para que sea más fácil calcular la mitad). Para eso, poner cierta cantidad de leche entera en una cacerola, por ejemplo 800ml (considerando que las latas traen 370ml aprox). Introducir un palillo de brochette en la cacerola y medir la altura de la marca de la leche. Hacer una marca en la mitad para poder calcular cuánto tiene que reducirse. Llevar la cacerola al fuego hasta que hierva, bajar el fuego al mínimo y dejar que se reduzca a la mitad. En ese punto tendrá un leve tono beige. Dejarla enfriar y colarla antes de utilizarla. Fuente: www.misanplas.com.ar
 
Si alguien puede compartir información reciente y comprobable (boeh!) de dónde comprar leche evaporada en Buenos Aires o resto de Argentina, por favor que lo deje en los comentarios y después lo agrego al post. Gracias!

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jueves, 20 de noviembre de 2014

Diferencias

En Santiago...



Los autos frenan para dejar pasar a los peatones;

El transporte público sube de precio en las "horas punta" (horas pico), pero hay una sola tarifa sin importar qué tan lejos viajes;

Entra tanto polvo por las ventanas que hay que limpiar la casa permanentemente... o vivir bajo un manto gris;



Hay un temblor, y nadie habla de eso (tan común es...);

Muchos departamentos no tienen calefacción a pesar de lo frío que es el invierno, porque el gas es muy caro y prefieren tener estufas eléctricas;

Podés pagarle con tarjeta de crédito hasta al "trapito" que te cobra el estacionamiento en la calle;

El lavadero se llama logia, el albañil o cualquier trabajador que viene a arreglar algo es "el maestro", no te preguntan cómo vas a pagar sino cómo vas a "cancelar", cheto es "cuico" y el embotellamiento de tráfico es "taco";


Tenemos queso Philadelphia para todos los días, pero los argentinos extrañamos el Casancrem;

Hay poquísima inseguridad pero me aconsejan tener cuidado en todas partes;

Los edificios no tienen Planta Baja, la planta baja es 1, de ahí se pasa directamente al primer subsuelo que es -1 y a mí se me rebela todo lo que aprendí en matemática;

Estos y otros detalles son los que voy detectando en mi día a día en Santiago. Sin profundizar en las ventajas o desventajas grandes que puede tener un país u otro, la adaptación a las cositas más cotidianas implica un consumo de energía enorme. Ayer tomé un colectivo por primera vez y creo que estuve medio día planeando ese viaje de veinte minutos, porque si me llegaba a pasar me moría! Las primeras veces en el supermercado tardé horas para encontrar cada cosa, porque los nombres y las marcas son distintas.

Los que se mudaron de país, ¿se acuerdan cuáles fueron las diferencias que les llamaron la atención al principio?

(Las fotos son de mi Instagram. ¿Ya nos seguimos? @cantandovictoria)

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miércoles, 12 de noviembre de 2014

Vivir afuera

Hace un mes pasé a integrar ese conjunto enorme y creciente de personas que, en este loco mundo, cruza las fronteras y se instala a vivir en otro país. Hace un mes que estamos con el Ingeniero viviendo en Santiago de Chile, y aunque es cerca, es país limítrofe, se habla el mismo idioma, no deja de ser un cambio rotundo de vida. Cambio que abrazo y recibo con entusiasmo porque me encantan los cambios, las oportunidades, y debo decirlo, porque estando tan bien acompañada me animo a casi todo.


La mudanza hasta ahora me tuvo totalmente ocupada (y entretenida!), pero uno de mis propósitos para esta nueva etapa es retomar el blog y mi actividad creativa con todo, y eso empieza hoy mismo. Voy a estar por acá más seguido y espero que con mucho para mostrar.

Gracias por leer!!!


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