Hay veces que una idea decanta de manera tan contundente que parece que alguien (¿Alguien?) la hubiese puesto ahí, con moño, para vos. Llámenlo insight, inspiración, o pura suerte. Yo estoy segura de que las buenas ideas no aparecen mágicamente. Que se generan con mucho trabajo, si y sólo si nos mantenemos activos (todos escuchamos la frase "la inspiración existe pero tiene que encontrarte trabajando"). Que las procesamos en segundo plano durante un tiempo hasta que un buen día están maduras para presentarse completas a nuestra conciencia. No ocurre muy seguido, pero qué fantástico es cuando pasa.
Eso fue lo que pasó con Habitar. Habíamos tenido varios encuentros con Loreto de La Casa de Juana, por distintos motivos. Después de una de estas reuniones, me quedé pensando que quería proponer algo lindo para el blog. Pero qué, ¿qué? Tenía que salir a cazar esa idea que estaba suelta por algún lado. No la apuré; saben que las ideas se espantan y se esconden si las apurás. Hice lo que dicen los expertos: pensé intensamente por momentos, anoté todo lo que se me ocurría, me relajé, me ocupé de otras cosas, volví a pensar, descansé. Y finalmente la idea se dejó atrapar, y no le faltaba ni una pata, estaba completa. Una propuesta que gustó, y que fundamentalmente me gustó a mí. Algo en lo que coincidimos y creemos tanto ellos como yo.
Así fue que nacieron dos cosas: una sección para el Blog de Juana, y una dirección para mí: volver a escribir. Esto continuará. Hoy comparto por acá el primer post que salió publicado el jueves pasado.
"La casa perfecta"
August 13, 2015
Por: Cantando Victoria
No es lo mismo una vivienda que un hogar, así como no es lo mismo residir que habitar. Las personas necesitamos viviendas donde refugiarnos del clima, de los peligros, y donde satisfacer nuestras necesidades básicas. Pero nuestras casas tienen algo más que esa función de supervivencia: son los lugares donde reflexionamos, convivimos, pasamos momentos íntimos, nos reconfortamos, donde trazamos proyectos y soñamos nuestro futuro. Los seres humanos no tenemos simplemente viviendas o guaridas, tenemos hogares.
Al buscar un lugar para vivir, la gente tiene prioridades diversas. Hay quienes prefieren cercanía al metro, quienes necesitan muchas habitaciones, y quienes sueñan con una casa con jardín. Pero hay una cosa que todos están buscando por igual: la casa perfecta. Y les vamos a contar un secreto: la casa perfecta no existe.
Esto es lo que sí existe: existen viviendas de más o menos metros, construcciones nuevas o antiguas, ubicadas en este barrio o en otro, más caras o baratas. Existen propiedades que se parecen más o menos a lo que deseas. Y existen habitantes que las convierten en lugares fabulosos para vivir: amigos que organizan asados, parejas que inician su vida juntos, jóvenes que se independizan, familias que se divierten muchísimo. Los habitantes convierten las casas en hogares. Más importante que la casa en sí misma es lo que nosotros hagamos con ella y en ella.
Hoy inauguramos una nueva sección del blog, "habitar", y esa palabra es nuestra propuesta: que habites el lugar donde vives (tu casa, tu barrio, tu ciudad). Que no te limites a tener tu domicilio allí, sino que lo vivas intensamente, lo hagas propio y dejes tu huella. En los próximos posts compartiremos más ideas sobre este tema.
Dicen que el hogar es donde está el corazón... entonces pon tu corazón en esa casa que tienes o que estás por ocupar, moldeala a tu gusto, llénala de recuerdos felices. La casa perfecta no existe, pero tú tienes el poder de hacer tu casa perfecta para tí.
Todas las fotos de este post pertenecen a La Casa de Juana.