Venezia, ti amo

Sigo mostrando algunas fotos de mi viaje. Hace unos día subí las de París, hoy les muestro el segundo destino: Venecia. Y quiero hacer público este sentimiento: Venecia, te amo, me quiero casar con vos, sos lo mejor que me pasó en la vida. 

Acá pasé mi cumpleaños, un día de lluvia y frío espantosos, pero que le encontramos la vuelta para disfrutarlo. Incluso en ese clima Venecia es adorable.

De día, de noche, a toda hora Venecia es pintoresca por donde la mires. Lo mejor es pasear sin rumbo por sus mil callecitas y puentes, porque a cada paso hay un rincón lindo para ver y sacar fotos.

El segundo día fue azul radiante, espectacular. Esta foto de las casitas de colores es en la isla de Burano. Las siguientes son de vuelta en Venecia.

Veo estas fotos y me muero por volver. Espero que les hayan gustado. Y si se aburren del vieje me avisan, eh? Yo muestro nomás porque me pidieron.

Que tengan una linda semana semi veraniega!

Cuerpo geométrico - DIY

Hace poco se me metió en la cabeza la idea de construir un cuerpo geométrico como adorno. Tenía una plancha de madera balsa y puse manos a la obra. ¿Qué resultó? Un icosaedro: un poliedro de veinte caras, cada una de las cuales es un triángulo equilátero.

Hacerlo es mucho más fácil de lo que parece. Esto es lo que necesitan:



Para un icosaedro con lados de 6 cm: 

* una plancha de madera balsa. Viene en tiras de 1 metro de largo por aproximadamente 10cm de ancho. La que usé es de 2 mm de espesor, pero puede ser otra.

* regla y lápiz para marcarla. Recomiendo recortar un triángulo en papel y usarlo como molde para dibujar la madera. Truquito: imprimir un triángulo equilátero de internet, si no se dan maña con la geometría para dibujarlo!

* trincheta o tijera, bien afiladas.

* cinta de papel

* pegamento universal transparente (yo estoy usando ese Pegatodo, pero puede ser UHU o Uni u otros).

Se recortan 20 triángulos equiláteros iguales. Yo elegí hacerlos de 6 cm de lado y el cuerpo final tiene unos 12 cm de alto. Cuidado al cortar: la madera balsa se astilla mucho, es medio inevitable.

Después, con pedacitos de cinta de papel, se van pegando los triángulos bien juntitos, por el lado de adentro. En la tercera foto se ve de qué forma acomodarlos: en cada vértice se juntan 5 triángulos.

Una vez que está cerrado, rellenamos las ranuras con pegamente transparente (se me traspapeló la foto de ese paso) y apretamos con cuidado de no hundirlo, para que se peguen las caras entre sí y quede más firme. De todos modos nunca va a quedar totalmente firme, es algo frágil, pero lindo para poner en un estante junto a libros por ejemplo. Creo que va muy bien con un estilo "escandinavo" con blancos, negros y madera clara.

¿Les divierte? ¿Alguien se anima a hacerlo en otros tamaños o con otro material? Podría quedar muy bueno en acrílico transparente.

Muy buena semana para todos!

A orillas del río Sena me senté y lloré

Paris, mis fotos no te hacen justicia.

Lo que esperaba ir a Paris, es indescriptible. Era casi una necesidad física. Me imaginaba el momento de ver por primera vez la torre y ya se me llenaban los ojos de lágrimas. Y Paris no me decepcionó, no, pero la realidad nunca es como lo que una se imagina. Tuvimos frío, mucho, muchísimo frío. Todo se veía gris. Los parques no tenían verde. En las fotos salimos con cara de congelados.

Paris, maldita coqueta, no podías darme todo de entrada. Me sedujiste y me dejaste deseando. Voy a tener que volver a visitarte alguna vez en verano, en otras circunstancias, para disfrutarte de otra forma.

Les dejo algunas fotos sueltas. Tengo tantas pero tantas de todo el viaje que ni siquiera yo pude verlas todas. Ya subiré algunas de otros lugares. No saqué muy buenas fotos, saqué fotos de turista alocada, click click click sin parar, hice las típicas taradeces como tocarle la puntita a la pirámide del Louvre o empujar la Torre de Pisa. Fue mi primera vez en Europa y quién sabe si habrá otra!

Esta última es una de mis preferidas. Se larga a llover en Trocadero.

Llegué a casa el lunes a la noche, y mientras dormíamos la lluvia arrasó Buenos Aires. Nuestra casa se inundó un poco, pero en comparación con lo que está viviendo tanta gente no fue nada. Me parece muy triste lo que está pasando, y al mismo tiempo me emociona toda la movida solidaria, y lo rápido que tantos argentinos se organizan para colaborar. Espero que todos nos podamos hacer un rato y hacer algún sacrificio para acercar nuestra ayuda a los que están en un momento desesperante. 

Buen fin de semana!

* Si les suena el título, es robado de un libro de P. Coelho (que no leí) "A orillas del Río Piedras me senté y lloré"