Desafío Living: donde todo puede pasar

Digo que todo puede pasar en este living porque objetos de las más variadas procedencias pueden encontrar su lugar y mezclarse acá. 

Si me hiciera la sofisticada, les diría que es ecléctico. Eso suena bien, ¿no? Si prefieren sinceridad brutal, pueden llamarlo "un rejunte", que no me ofendo! 

Resulta que en la época en que estábamos buscando casa, se cruzó por mi camino Casa Chaucha. Ya saben, es un momento de la vida que te marca! jaja. Encaré la decoración con la firme convicción de que no tiene sentido gastar en muebles o adornos caros, que todo lo que se consigue sirve y se puede reciclar y lograr que forme un conjunto armonioso. 

Bueno, eso último no se si lo logré. A veces pienso que se me fue la mano al no respetar ningún estilo. Pero no me quita el sueño, porque en mi casa las cosas rotan y cambian permanentemente. Si un mueble me deja de gustar, lo pinto o lo llevo a otro cuarto, y de última siempre lo puedo vender por M. Libre. Lo que sí me importa es generar un ambiente acogedor, cómodo, simpático, que cuando alguien entre se sienta bienvenido y le den ganas de sonrerir.

Cuando repaso las cosas que tenemos en el living, me doy cuenta de que en muchas de ellas no gastamos un peso. El sofá blanco es el que estuvo toda la vida en la casa de mi familia. Justo cuando nos íbamos a mudar, mis papás lo estaban cambiando, así que se vino con nosotros. Tiene todas fundas que se sacan y se lavan en lavarropas, por eso la mugre no me preocupa. 

La lámpara y la bibliotequita son regalos de casamiento. El cuadro de colores es un tapiz bordado a mano, una de las tantas artesanías mexicanas que habitan la casa de dos personas que no conocen México... jaja... Lo mismo el "charro" que está sentado en el estante superior de la biblioteca, la manta de colores abajo en el canasto, y un cuadrito de la Virgen de Guadalupe que se ve en otra foto. 

El espejo, otro mangazo. Rescatado de la casa de los abuelos de mis primos, cuando la estaban vaciando para venderla. Nadie lo quería... vino conmigo.

Acá abajo muestro dos vistas generales, la primera desde el comedor (que es totalmente el mismo ambiente, aunque me las ingenié para que no saliera en las fotos); la segunda desde el hall de entrada.

La mesita ratona es comprada en el Tigre, y llegó hace una semana, justo a tiempo para la sesión de fotos.

El sillón negro es uno de mis amores: estuvo toda la vida en un depto de Mar del Plata de mis abuelos, y lo adopté porque sus nuevos dueños no lo apreciaban! Aunque al principio el Ingeniero lo miró con recelo, lo ubicamos estratégicamente frente a la tele y se convirtió en el mueble que más usa en toda la casa!

Las tres mesitas nido ya las conocen, les mostré su antes y después en este otro post. Perdón por la repetición, pero es que las tengo en el living, qué le voy a hacer (además, salen tan monas en las fotos!).

Por último, el mueble donde está la tele. Una cómoda estilo americano, comprada en M. Libre por 180 pesos hace un año y medio. Una ganga. Tiene el enchapado un poquitín roto en un costado, por eso necesita pintura, pero no me decido de qué color pintarla.

Encima de la cómoda se ve también el cuadro que hice con muestrarios de pintura, como ya les conté en este post. Este rincón no estaba muy fotogénico el día que saqué las fotos, pero no quería dejar de incluirlo para que se entienda cómo es el living en general. A la derecha, donde está la silla blanca, empieza la mesa del comedor. No es un espacio muy grande para incluir living y comedor, pero como es bastante abierto (se comunica al hall y a la cocina semi abierta) no se siente amontonado... Salvo, claro, cuando somos miles, como el fin de semana que pasó, que estuvimos de festejo y parece que por acá pasó un tornado!! Les aseguro que hoy la pinta de este living no es ni parecido a lo que se ve en las fotos... Que alguien venga a ayudarme a ordenar!!!!


Espero que les haya gustado. Estas fotos participan del desafío de Bla-d de junio, si quieren pueden ir a ver los otros livings que están presentando, hay cosas muy buenas. Muchas gracias por visitarme!


Vicky